Un tribunal federal de apelaciones de Estados Unidos suspendió este sábado la obligación de vacunar a los empleados de empresas de más de 100 personas, instaurada por el presidente Joe Biden, mientras examina posibles «graves problemas constitucionales».
La medida del presidente estadounidense implica que decenas de millones de empleados sean vacunados contra covid-19 antes del 4 de enero, bajo pena de tener que someterse a pruebas muy regulares.
En su decisión, la Corte de Apelaciones del 5° Circuito de Estados Unidos dictaminó que los demandantes habían «dado argumentos que sugerían que existen graves problemas constitucionales y procesales» con el texto del gobierno. Por lo tanto, la medida queda «suspendida», en espera de que el tribunal la examine.
«Podremos desafiar el abuso de poder inconstitucional de Biden en la corte», escribió en Twitter el gobernador de Texas, Greg Abbott.
«El presidente no impondrá procedimientos médicos al pueblo estadounidense sin los controles y contrapesos que ofrece la constitución», dijo el fiscal general de Luisiana, Jeff Landry, en un comunicado.
Anunciada a mediados de septiembre, fue adoptada esta semana por el gobierno e inmediatamente impugnada en los tribunales por al menos 27 estados del país.
Esto supone un gran revés para Biden, quien acababa de lograr su primera gran victoria legislativa con la adopción en el Congreso el viernes de su plan de inversión en infraestructura.