Las autoridades de inmigración arrestaron casi a 72,000 migrantes indocumentados en el período fiscal 2021, la cifra más baja en una década y después de 104,000 capturas en el año anterior, informó este martes el diario “The Washington Post”.
Entre los años 2017 y 2019, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) llevó a cabo un promedio anual de unos 148,000 arrestos, mientras que en 2011 las capturas efectuadas fueron 322,000, todas estas cifras muy lejos de las registradas en el pasado año fiscal.
Desde la investidura presidencial de Joe Biden los arrestos han disminuido sustancialmente por una política del gobierno federal que da prioridad a la captura y deportación de individuos que han cometido crímenes y terminó con las redadas masivas de inmigrantes indocumentados en sitios de trabajo.
Asimismo Biden ordenó una pausa de 100 días en las deportaciones, una medida rápidamente objetada por el juez federal Drew Tipton, designado por el expresidente Donald Trump.
El secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas indicó en septiembre a los funcionarios de ICE que el mero hecho de que una persona haya ingresado sin autorización a Estados Unidos no debería ser la causa única de su arresto y deportación.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) se ocupa de la aplicación de las leyes de migración en el interior de Estados Unidos, mientras que la Oficina de Aduanas y Control de Fronteras (CBP) atiende la situación en áreas fronterizas.
En el período fiscal 2021, que concluyó el pasado 30 de septiembre y empezó el 1 de octubre de 2020, CBP efectuó más de 1.73 millones de capturas, la cifra más alta desde 1986.
Sin embargo, a comienzos de 2020 ICE llegó a tener bajo su custodia un promedio diario de unas 40,000 personas, pero desde el comienzo de la pandemia de Covid-19 la agencia fue reduciendo esa cifra y actualmente tiene poco más de 22,200 migrantes detenidos, aunque llegó a tener cerca de 14,000 en abril de este año.
Los grupos que abogan por los migrantes han protestado durante un año y medio por las condiciones de reclusión de los migrantes, muchos de los cuales han permanecido por meses en los varios centros de detención operados o supervisados por ICE.
ICE indica que desde el comienzo de la pandemia hasta ahora, 375,639 migrantes detenidos fueron sometidos a las pruebas de detección del coronavirus, con poco más de 29,000 casos positivos y nueve muertes por covid-19.